martes, 1 de mayo de 2012

Castella dice "Cosas que no se hacen ni de salon"





 José Mari Manzanares que ha caído con el pie derecho ante la afición de hidrocálida, después de cuajar dos faenas de diferente corte, artísticas con mucho fondo, torería y contundente con la espada para cortar un total de cuatro orejas.


Por su parte Sebastián Castella le cuajo sin duda una de sus mejores faenas en tierras aztecas a un muy buen toro de San Miguel de Mimiahuapam, llamado "Amor Mío", número 73 de 525 kg que mereció el indulto por su calidad, al que el francés toreó  con elegancia, arte y sobre todo con sentimiento, conectando con el tendido.

En Aguascalientes, la ciudad más taurina del mundo entero donde los milagros ocurren cada día, una tarde de toros única, irrepetible en esencia y con la emoción que conmovió a las más de diecisiete mil personas que asistieron a la plaza, es ya parte de la historia romántica del toreo en esta bendita tierra conocida como “La Tierra de la Gente Buena”. Cuando el ser humano llega a imaginar, inocentemente, que ha visto todo, es porque no estuvo el pasado lunes 30 de mayo en la plaza de toros Monumental de la ciudad mexicana, donde Sebastián Castella nos dio una lección de que en la vida, la perfección siempre es mejorable. Un marco donde su faena quedará en la memoria de todos los que fuimos privilegiados de observar cómo el torero francés hizo del toreo un poema escrito en el viento con arena hidrocálida proveniente de sus mágicas muñecas, esas que nos hacen ver cada vez que viste de luces, su tan particular difícil facilidad para torear. Lo único que falta en este Aguascalientes es que Dios pueda inventar un concepto divino que sea digno de aplicarlo al indulto de Castella, porque lo hermoso, excepcional, mágico y divino, no es siquiera el inicio para definir la totalidad de su trasteo a ese toro de nombre “Amor Lindo”…


Por Alejandro Román



 Por su parte Juan Pablo Sánchez, no paró  por disposición y valor y después de una tarde cuesta arriba,  cortó las dos orejas a un toro de regalo que era un tío después de una entregada y firme faena culminada con una buena ejecución de la suerte suprema.


Tampoco se dejó ganar la pelea Arturo Saldívar que de no ser por fallar  con el acero también hubiera salido a hombros, ya que estuvo en torero, dispuesto, con mucho valor, profundidad y sobre todo con esa actitud de estar  ‘tu  a tu ‘ con quien sea. Los ejemplares de San Miguel de Mimiahuapam, dieron un buen juego en general.


Aguascalientes
. Cuarta de Feria. Casi lleno en tarde calurosa.
 Nueve toros de Mimiahuapam, bien presentados.
 Destacó el quinto que fue indultado. Sebastián Castella, ovación y vuelta al ruedo tras indulto;
 Jose Maria Manzanares, dos orejas y dos orejas;
Juan Pablo Sánchez, división, silencio y dos orejas en el de regalo.
 Arturo Saldívar, ovación en ambos.

Andres Roca Rey