La novillera Conchi Ríos ha hecho historia en Las Ventas al ser la primera mujer que corta dos orejas a un mismo astado en esta plaza. La murciana sorteó en quinto lugar un extraordinario ejemplar, con clase, entrega y que lo pidió todo por abajo. La novillera murciana ha firmado una completísima faena, sin fisuras, toreando perfecto por ambas manos. Lo entendió a la perfección desde el inicio. Por el pitón derecho hubo series que destacaron por su hondura dando distancia siempre al de José Cruz. Al natural, las series tuvieron mucho encaje y siempre con la firmeza de plantas en la que logró muletazos muy despaciosos. Faena de gran ligazón y mucha vibración que coronó de gran estocada.
En su primero, no se le notó su vuelta a los ruedos. La murciana anduvo decidida dando el máximo ante un novillo encastado y exigente. Dejó buenos momentos sobre todo al natural en algún muletazo largo, sin embargo emborronó todo con los aceros.
Las sorpresas en el toreo se dan con cuentagotas, y más en Madrid. Es difícil sobre el papel vaticinar el triunfo de un torero que hace su presentación en Las Ventas. Pero una vez más se ha vuelto a demostrar que con afición, amor y pasión por la profesión y, sobre todo, con valor y buenas maneras, el milagro es posible.
Esto es justo lo que pasó con Conchi Ríos, que no hace ni dos semanas estaba en la cama con un muslo partido después de la terrible cornada de cinco trayectorias que sufrió en Riuemes (Francia), y que hoy, con los puntos aún puestos, ha dictado una lección de profesionalidad y amor propio para abrir