martes, 14 de mayo de 2024

Andres Roca Rey fue declarado triunfador absoluto, con cinco orejas y un rabo



Por; Juan Garcia

Altoro México de la actuación de los 13 toreros extranjeros en el 

Serial Taurino Aguascalientes en el cual Andres Roca Rey fue declarado triunfador absoluto, con cinco orejas y un rabo

Andres Roca Rey ‘come aparte’ - Juan Antonio de Labra


La mejor entrada la hizo Andrés Roca Rey el 25 de abril, y si no se llenó la plaza sería por el horrible calor de las últimas gradas del tendido soleado, donde quedaron apenas algunos huecos de cemento caliente a la vista. Este fue un primer logro del peruano, indiscutiblemente, además de acceder a torear una ganadería, la de Corlomé, que nunca había enfrentado, así que doble agradecimiento para él.

Posteriormente, desplegó su sitio, su valor sereno, su claridad de ideas, delante de dos toros –con más fuelle el segundo– a los que cuajó como si estuviera en el patio trasero de su casa recostado en una hamaca, fumándose un ocote.

Las dos primeras orejas le abrieron
la puerta de las otros dos, y como el entusiasmo de la gente estaba desbordado, y su espada fue de una contundencia irrefutable, no fue difícil concederle también un rabo para contabilizar el triunfo más abultado de la feria y el más importante de las 87 corridas que ha toreado en México desde que debutó en la plaza de San Miguel El Alto en septiembre de 2015.

Así llegó el famoso "Cóndor de los Andes" a su segunda tarde en Aguascalientes, en la última corrida del ciclo, donde se echó en falta que la entrada no rozara el lleno de su primer paseíllo, después de lo que había ocurrido el día de San Marcos. Pero eso no fue impedimento para que volviera a prodigarse en la que quizá sea la faena más recia del Serial Taurino 2024, misma que pasó desapercibida para la mayoría del público.

Fue la que le hizo a "Vaquero", número 414, negro, con 492 kilos, del hierro de Villa Carmela, un toro encastado, que tuvo temperamento, y al que le plantó cara sin ningún miramiento para zumbárselo sin reparar que en estos próximos días tiene la Feria de San Isidro por delante.

Consciente de que el toro podía desarrollar genio si no lo hubiese toreado con tal seguridad –y hacerle daño si le echaba mano–, Roca Rey tiró la moneda al aire en un gesto de pundonor profesional que habla muy bien del sitio de privilegio que hoy día ocupa en el toreo. Y si a unos no gusta su toreo, es casi seguro que a todos convence.

Galeria de fotos; 


Una estocada desprendida fue el impedimento para que la autoridad no le concediera la que hubiera sido la oreja de más peso específico de la feria. Pero, seguramente, Andrés se quedó muy satisfecho del deber cumplido, que para eso es la figura del toreo que hoy día parte el bacalao.”

Fuente; https://www.altoromexico.com/index.php?acc=noticiad&id=46518





Andres Roca Rey